Grandes Maestros de la Literatura: Edgar Allan Poe (1809-1849)
La literatura de terror es uno de los géneros menos difundidos pero que posee, de manera subterránea, una legión de admiradores en todo el mundo. Desde los ávidos lectores y consumidores de estas creativas y fantásticas historias hasta los principiantes, alrededor de sus principales exponentes se crean grupos de conversación, cofradías, pequeñas hermandades que mantienen vivo su legado a través de los años. Los relatos escritos -a diferencia del cine de suspenso que se ampara, cada vez más, en los efectos especiales, animaciones por computadora o vestuarios y maquillajes extremos- apelan directamente a la imaginación del lector, recuerdos y pesadillas que se adaptan a la calidad de la narración y que potencian la experiencia atemorizante, una sensación en la que muchos encuentran placer como lectores. En ese sentido, la obra de Edgar Allan Poe es una de las más importantes y que han dado origen a infinidad de ilustraciones, películas y demás adaptaciones de sus imaginativos, escalofriantes y sorprendentes cuentos. En esta nota analizamos la trascendencia de este escritor norteamericano, uno de los más influyentes del siglo 19.
El relato corto acerca de historias en las que los detectives tienen un rol sobresaliente, le debe mucho a la imaginación del escritor, poeta, crítico y periodista Edgar Allan Poe. Poe era capaz de contar las historias más espeluznantes haciendo uso de una habilidad narrativa muy fina e impresionante. La influencia que este genio de la narración terrorífica ha ejercido sobre diversas corrientes literarias como el simbolismo francés y el surrealismo no es del todo conocida, pero definitivamente existente. Muchos escritores de la talla de Baudelaire, Dostoyevski, Faulkner, Kafka, Guy de Maupassant, Thomas Mann, Jorge Luis Borges y Julio Cortázar se nutrieron de las historias de Poe para elaborar ellos mismos sus propios relatos.
Ya con su segundo libro: Al Aaraaf, Tamerlane and MinorPoems, publicado en Baltimore en 1829, Poe recibió los primeros halagos de los críticos literarios de la época. John Neal, un prominente analista literario del siglo XIX, se atrevió a afirmar que Poe sería el primero en tener un lugar en las filas de los auténticos poetas. A la edad de veinticuatro años y cuando se encontraba en serias dificultades económicas, Poe se hace acreedor al premio de cincuenta dólares que entregaba el SaturdayVisiter(un periódico de Baltimore), por su cuento: Manuscrito encontrado en la botella. Este cuento fue considerado por la editorial del diario como un relato de una calidad superior a cualquiera que hubiera sido entregado antes.
La Neurosis provocada por un estado esquizofrénico y la muerte como un personaje más de sus narraciones, están presentes en toda la obra de Poe. Estos dos elementos son como el combustible que hace marchar el ingenio descriptivo de este representante de la novela gótica. Muchos de los personajes de Poe, terminan por perder la razón y acabar con sus vidas en situaciones en las que su salud mental se ha ido deteriorando poco a poco hasta alcanzar la demencia incurable. Así por ejemplo en su cuento de terror, La caída de la casa de Usher (1839), un joven hombre es invitado a la casa de un amigo de su infancia, RoderickUsher, un frágil y extravagante artista que vive con su hermana Lady Madeline, una mujer de una salud también muy débil. Ante el desvanecimiento repentino de su hermana, producto de la extraña e indefinible enfermedad que padecía, Usher decide enterrarla sabiendo que no está muerta, situación que provoca verdadero pavor al lector. Cuando finalmente la triste mujer hace su nueva aparición en la obra, el trágico desenlace es ineludible. Todos, incluso la casa, están destinados a sucumbir en una atmósfera de angustiosa desesperación.
Con el cuento, Los crímenes de la calle Morge, publicado en la revista Graham´s Magazine en 1841, Edgar Allan Poe, apertura la novela policíaca moderna. Dos mujeres, quienes son brutalmente asesinadas en algún lugar de París, son el vehículo que Poe utiliza para introducirnos en un relato lleno de investigaciones, pistas, pesquisas e interrogatorios realizados a fin de encontrar al inicuo asesino. Cuando todo parecía indicar que este sería un caso sin resolver, Poe inventa un personaje de esos que solo podían salir de la pluma de este genio de las letras universales, el detective M. Dupin quien tras incansables averiguaciones, logra descifrar el enigma.
Las virtudes poéticas del padre de la novela policiaca y de terror, se ven constatadas en su inmortal poema narrativo El cuervo o The Raven (1845) como se llamó originalmente en inglés. La atmósfera sobrenatural que este hijo de Boston, Massachussets logra transmitir en esta obra, es inigualable.
Un joven narrador que ha perdido a su amada Leonora escucha golpes sobre la puerta de su habitación. Cuando este decide ir a indagar sobre los golpes, un cuervo ingresa y se posa sobre el busto de Palas, la Diosa griega de la guerra. Ante el intento del relator de historias por acercarse al cuervo y saber su nombre, el ave le responde “Nunca más” o “Nevermore” en inglés. Atónito y sin salir de su asombro, el individuo cree que el pájaro debe haber aprendido la única palabra que conoce de su antiguo dueño. Nuevamente el talento de Edgar Allan poe, nos remite a una situación en la que simbólicamente el personaje principal está sentenciado por el incomparable poder de la palabra, Nevermore o Nunca más en este caso, palabra con una densa y pesada carga premonitoria
Edgar Allan Poe ha estado presente en la cultura universal a través de distintas manifestaciones del quehacer humano. Su poema El cuervo, ha sido llevado al cine en dos oportunidades. La primera de ellas a cargo del director Roger Corman en 1963 y la segunda vez en el año 2012 por el director James Mc teigue. Varias Pinturas del artista Gustave Doré tienen como fuente de inspiración la obra de Poe.
El maestro de la literatura plagada de situaciones terroríficas y escalofriantes, supo entrar en lo más profundo de la psicología de sus lectores para apoderarse de esta y manipularla de acuerdo al tono y trasfondo de la narración. Nadie puede negar haber sentido escalofríos al leer un libro de Edgar Allan Poe, un escritor cuyo nombre seguiremos oyendo por siempre porque pertenece a todos los amantes de las buenas letras.
Es bueno saber que en la colección de textos de las bibliotecas escolares tenemos algunos de sus cuentos, fomentar en nuestros estudiantes la fascinación por la lectura, cualesquiera su género es aumentar en ellos la creatividad y la libertad para demostrar su talento que en muchos puede aún estar escondido.