Page 18 - Palabra de Maestro 65

calidad venidas del mundo fabril
y del sector servicios.
Entonces, ¿qué es lo público?
para el neoliberalismo
Lo público ha sido una
construcción histórico-social de
la modernidad capitalista y de
los diferentes relacionamientos
que el poder ha ido haciendo
de los diferentes agentes que
intervienen en su órbita. Nos
encontramos con un concepto
que no tiene una única acepción,
ya que al convertirse en central
en los procesos de globalización
capitalista y neo-liberal en
marcha, la constitución de los
ámbitos enmarcados en su esfera
de acción y la determinación de
sus particularidades depende de
posiciones políticas e ideológicas.
Por esta razón, lo público se ha
llenado de significados diferentes.
Para algunos es sinónimo de lo
que hace y debe hacer el Estado
y toda su institucionalidad.
Para otros es otra esfera que se
antepone al Estado, denominada
como "sociedad civil". Para otros
es el lugar de la construcción del
bien común.
Lo interesante es que lo
público existe en cuanto por
mucho tiempo lo privado ha sido
su complemento y negación;
y en alguna medida, tener un
punto de vista sobre lo público
significa tener claro cómo se dan
las relaciones entre individuo
y sociedad en el ámbito de la
cultura, la economía, lo político y
lo social, en donde lo público es
entendido como el lugar colectivo
en el cual se relacionan, en el
Estado-nación, los ciudadanos
como comunidad de propietarios
y lo privado como el ámbito en el
cual se relacionan los individuos
entre sí.
La concepción neoliberal de
lo público plantea que en estos
tiempos de globalización se da
un mundo sin fronteras nacionales
que obstaculicen la circulación del
capital. Se revive la subordinación
de lo colectivo a lo individual y de
lo público a lo privado, elementos
característicos del liberalismo
16 Palabra de Maestro 65 - Diciembre 2015
clásico. Por ello, el neoliberalismo
hace un replanteamiento de
los Estados-nación y pone en
cuestión las políticas sociales,
atacando su carácter público,
señalándolas como un privilegio
de las burocracias o los grupos
que políticamente representan
la hegemonía de ese momento; y
por ello propone una orientación
de lo público al mercado, y
propone lograr el interés colectivo
mediante la realización de los
intereses privados, dándole paso
a denominaciones como servicios:
educación, salud, etc.
Aparece un Estado al que
se le reducen sus funciones,
reduciendo su presencia y
garantizando una sociedad
centrada sobre el individuo
y el mercado, que disuelve lo
colectivo en un escenario donde
quedan subordinados lo colectivo
a lo individual y lo público a lo
privado.
Lo público en educación,
desde los movimientos sociales
Aníbal Quijano nos ilustra
muy bien el problema de
construir lo público y participar
en la deliberación para construir
políticas públicas desde los
movimientos sociales, críticos al
proyecto de poder en marcha.
La dificultad radica en que el
poder ha tomado múltiples
formas y es necesario construir
lo público alternativo, bajo esas
múltiples formas, y ello va a
requerir transformar prácticas
y construir nuevas maneras de
luchar, para dar respuesta a este
tiempo histórico, manteniendo en
la acción cotidiana el proyecto de
emancipación y de transformación
de la sociedad.
Los avatares de la lucha social
de la última década del siglo
anterior, frente a las nuevas leyes
de educación que se generaron
a lo largo del mundo (143) y en
América Latina (27), mostraron
cómo el capitalismo intentaba
refundar su escuela sobre las
bases de un nuevo proyecto de
control en marcha, basado en el
conocimiento, la tecnología, la
Una de las tareas de los educadores
críticos va a ser develar los
intereses particulares y de grupos
de poder de la sociedad existentes
en los discursos y prácticas de la
modernización de la educación y la
escuela capitalista actual, plantea el
investigador colombiano.
información y la comunicación,
con un sustento de administración
neoliberal. Se inauguran nuevas
formas de lucha de resistencia,
protesta y propuesta, desde las
cuales se iniciaba la emergencia
y construcción de los nuevos
proyectos anticapitalistas en
las diferentes esferas en las
cuales el capital iniciaba la
reestructuración, para dar forma
a sus nuevas maneras y poder en
la esfera educativa.
Nunca fueron tan políticas la
pedagogía y la educación como
en estos tiempos. El capital ha
tomado para sí el conocimiento y
la tecnología, y los ha reconvertido
como elementos centrales, junto a
la información y a la comunicación,
para construir su nuevo proyecto
de control. Así ha reorganizado
la sociedad desde su horizonte,
obligando a los grupos críticos
a un ejercicio de replanteo de
la tradición crítica. Construir
políticas públicas no es sólo su
comprensión y denuncia, sino
también presentar propuestas
que muestren caminos de
emancipación y transformación
desde los sectores populares,